Muchos de nuestros usuarios, tanto compradores como vendedores nos preguntan en referencia a este temido momento: LA NEGOCIACIÓN.
Y sí, parece que estas palabras atemorizan a ambas partes, pero no debería ser así.
Cuando se consigue despertar el interés de un comprador real, ya hay una gran parte ganada en este tipo de transacciones. En algunas ocasiones, y sobre todo cuando hablamos de nichos de mercado, la que más.
Tras ello es el momento de llegar a un mismo punto en común, es decir que todo lo incluido en el negocio online cumpla con las expectativas del comprador.
Siempre hacemos mucho hincapié a nuestros vendedores, y cuando decimos mucho, es que es mucho, que deben especificar en sus anuncios o en una primera conversación qué se incluye y qué no en la venta. Un concepto muy importante.
Cuando un interesado accede a un anuncio, la información que encuentra es la prmiera carta de presentación, como una tarjeta de visita, y es lo que hace que le interese o descarte a priori un negocio online. Si eso está claro desde el primer momento, lo único dónde habrá dudas es en el precio de venta.
"¿Cuánto debo pedir por mi negocio online?"
"¿Qué debo tener en cuenta para valorar mi negocio online?"
Y lo mismo ocurre desde el punto de vista del comprador:
"¿Qué oferta económica lanzo?"
"¿Intento negociar y bajar el precio o acepto la que me propongan?"
En este campo, nosotros lo tenemos muy claro, y es lo que siempre os recomendamos: “Hablando se entiende la gente”
Y aunque parezca muy obvio, la mayor barrera a la hora de negociar es romper el hielo y probar. Lógicamente para no perder nunca, es obvio que hay que empezar por lo alto para ir bajando si es un precio negociable, y crees que puedes sacarle cierta rentabilidad, o solicitar una valoración del negocio a un equipo de expertos sobre la materia para tener un importe de referencia en el mercado real.
Cuestiones como la urgencia en la venta, o determinadas situaciones entre los socios, pueden ayudar a adquirir, o tener que vender, un negocio online por mucho menos de su valor, pero pueden ser una buena opción para no generar costes de oportunidad o de tiempo innecesarios, y comenzar a ver otros proyectos.